NUEVOS TALENTOS | Descubrimos al tinerfeño Rei Baez

¿Cuánto tiempo llevas en la música?

Llevar llevo toda la vida cantando desde pequeño. Dedicado a ella, a crearla y producirla, entre tres y cuatro años, llevo ya 100% implicado con mucha pasión en la composición. Empecé en una académica profesional de canto hace 4 años donde he podido recibir clases de profesores muy destacados. El canto y la voz es una de mis debilidades al amarlo tanto no me conformo con saber que tengo buena voz sino en sacar lo mejor de ella y nunca me paro. Estuve tiempo compaginando clases y trabajo hasta que decidí dedicarme al completo a la música y hoy por hoy las clases son a diario, donde también practico el piano con el cual compongo mis canciones. Me considero una persona exigente, aplicada, perfeccionista y visionaria, amante de la música con un vínculo arraigado desde mi infancia (mi madre siempre decía que mi voz era muy bonita siendo ella mi mayor fan).

¿Cuál dirías que es la mejor canción para que todo el mundo conozca tu trabajo?

Esa pregunta es muy difícil para mí ya que todas mis canciones son «mis niñas» y eso es como preguntarle a un padre a que hija ama más ya que todas tienen un pedacito de mí. Son letras con sentido que se pueden cantar fácilmente y disfrutarlas a buen ritmo. Están dirigidas a un público poético y en cierto grado son aptas para románticos: «Solo una cita» o «Contigo» por nombrar algunas. Pero al público más bailable y disfrutón les recomendaría «Piel Morena»o bien mi último single «Turquesa«. Yo disfruto con todas pero la obra más completa tanto a nivel proyecto como a nivel interpretativo diría que es «Ella» una canción que reivindica el empoderamiento de la mujer frente a un problema social tan importante como es el maltrato físico y psicológico del género femenino. Mi intención siempre ha sido captar un público variado y amplio ya que soy polifacético y con ello procuro que cualquiera se sienta identificado con mis letras para poder llegar al lugar de donde proceden… el corazón. 

Aprovecho para dar mis más sinceros agradecimientos a todas las personas que hoy por hoy me escuchan desde el primer hasta el último y el acogimiento que he recibido tanto en España como Latinoamérica en general y que esto es por y para ellos no hay más motivos. 

¿Cuáles son tus planes para el futuro dentro de la música?

Mis planes ya los estoy desarrollando a día de hoy pero en el futuro es en lo que centro todas mis energías en este momento ya que recientemente acabo de estrenar una canción titulada «Turquesa» donde he podido colaborar con grandes referentes del panorama nacional. Un proyecto que se ha trabajado con mucho esmero y mimo durante seis meses. Respecto al próximo año ya hay cosas en marcha por lo que calculo que dentro de no mucho ya estaré presentando otros nuevos trabajos.

¿Qué te gusta hacer cuando no estás haciendo música?

Curiosamente las cosas con las que más disfruto en mi tiempo libre son con los trabajos manuales, me gusta elaborar y crear cosas nuevas. Me dediqué a la cocina profesional como chef durante muchos años y ahora solo cocino para los míos. Me encanta restaurar cosas viejas y rejuvenecerlas dándoles una segunda oportunidad. También disfruto mucho de la botánica donde paso muy buenos ratos y donde me relajo en mi propio oasis particular en casa. Me gusta todo lo relacionado con el mundo animal y las actividades al aire libre que me conecten con la naturaleza. Disfruto de largas caminatas y paseos con mi mejor amigo «Duque» mi lindo perro donde encuentro mi mayor y más sana vía de escape a esta profesión que en ocasiones se torna estresante y exigente.

¿Qué opinas de la revolución del streaming musical?

Respecto al streaming digital creo que es lo mejor que nos ha podido pasar a los artistas ya que nos permite mostrar nuestra música al mundo de forma independiente y darnos a conocer cosa que hace años era imposible si no era a través de una discográfica. Es una herramienta al alcance de cualquiera que te sumerge en un mundo enorme de posibilidades para explorar y a la carta. Creo que vivimos en la era del «click».